Elegir una temática para nuestra web es un paso previo y fundamental, muchas veces infravalorado por quienes inician un proyecto sin pararse a pensar en sus posibilidades de éxito.
Es probable que, muchas veces, se te haya pasado por la cabeza poner en marcha tu propia página web; para hablar en ella de tu afición favorita, para dar visibilidad a tu negocio o, por poner otro ejemplo, para intentar generar una fuente de ingresos alternativa. Sin embargo, también es muy probable que hayas desistido en el intento por considerar que no tenías los conocimientos suficientes o por la enorme montaña de trabajo que aparentaba acarrear.
No te preocupes. Si eres de los que pensaron así en un determinado momento, cambiarás de opinión con este curso. No sólo porque te darás cuenta de que poner en marcha una web es mucho más fácil de lo que pueda parecer, sino porque tampoco requiere de excesivo trabajo, sobre todo si tienes las ideas claras y sabes planificarte.
Pero, vayamos poco a poco. Si queremos dar vida a nuestra propia web, lo primero será elegir su temática; es decir, decidir qué tema o temas vamos a tratar en ella y bajo qué enfoque.
Esto, que a primera vista pudiera parecer un paso sin importancia, tiene mucha relevancia, ya que internet está plagado de muchas webs muy buenas y trabajadas que fracasaron por no saber definir su temática o por hacer bueno aquel dicho que reza: «ser aprendiz de mucho y maestro de poco».
La temática de nuestra web
Uno de los errores más comunes que suelen cometer quienes se inician en el mundo de la creación de páginas web es plantearse hacer una que trate de muchos temas o de un tema demasiado genérico. Esto supone un error garrafal, ya que Google, el todopoderoso buscador que todo lo puede, no nos hará el menor caso y nuestro trabajo caerá en el cajón del olvido.
Si haces una página web que trate sobre temas muy amplios y poco concretos, los buscadores la posicionarán mal, y eso se traducirá en que tu página será poco visitada y, por tanto, tu trabajo no habrá servido de mucho. También, debemos tener presente que, cuantas menos visitas tenga la web, menos posibilidades habrá de que le saques algún tipo de rentabilidad económica.
Lo ideal es buscar una temática muy concreta o, lo que es mejor, buscar un nicho dentro de una temática en el que puedas convertirte en un auténtico especialista. Haciéndolo así, conseguirás que tu página se convierta en un referente dentro del tema concreto que trates, lo que se traducirá en un buen posicionamiento en los buscadores y en un considerable número de visitantes interesados en lo que escribes. Esto es así, porque te considerarán experto en la materia. Tu opinión será valiosa para ellos y estarán ansiosos de seguir leyéndote.
La importancia de encontrar un buen nicho
Ante todo, definamos lo que es un nicho:
Un nicho es una temática específica, dentro de otra temática más general, que requiere de un alto grado de conocimientos y de especialización. Los nichos, a su vez, pueden dividirse en subnichos.
Para entender mejor esta definición (muy casera, por cierto) recurramos a un ejemplo:
Supongamos que te gustan los deportes y, dentro de esa temática, te encantan los deportes náuticos. Pues bien, un nicho podría ser el que tratase sobre las competiciones nacionales de piragüismo, y un subnicho, perteneciente a ese nicho, lo tendríamos escribiendo sobre las competiciones de piragüismo que se dan en una determinada región o en una categoría concreta.
Una cosa está muy clara: cuanto más concreto sea tu nicho o subnicho, más fácil será que Google te posicione bien, y más fiables y fieles serán las visitas que tu web reciba. Por supuesto, hay veces en las que no tienes mucha elección a la hora de escoger la temática (por ejemplo, si quieres crear una web que dé visibilidad a tu pequeño negocio familiar), por lo que mi recomendación va dirigida a quienes tienen la posibilidad de escoger libremente la temática de su página web.
Lo dicho: no busques escribir sobre generalidades, es mejor que te especialices en un tema muy concreto en el que tengas mucho que decir.
Pero ¿y si quieres sacarle rentabilidad económica a tu web? En ese caso deberás preguntarte qué diferencia hay entre una web de afiliación y una web que va a generar ingresos mediante anuncios.
Una web de afiliación
Llamamos afiliación a la labor de intermediario que podemos asumir en la venta de los productos y/o servicios de una determinada empresa.
Así, puedes llegar a un acuerdo con una marca comercial (por ejemplo, Amazon) para publicitar sus productos y/o servicios en tu web; lo que se conseguirá gracias a unos enlaces publicitarios, proporcionados por la empresa, que incrustarás en la página y que podrán generar ingresos si tus visitantes cliquean sobre ellos y realizan una compra.
Al poner en marcha una web de afiliación, obtendrás ingresos gracias a las comisiones que pagan las empresas a las que publicitas; por lo que, en muchos casos, esta fuente de ingresos puede ser muy estable y sustanciosa.
Cabe resaltar que, cuando los visitantes de la web hacen sus compras, tras cliquear sobre un enlace, el producto o servicio que adquieren no les sale más caro; simplemente es que la empresa en cuestión comparte beneficios con el propietario de la página.
El objetivo de una web de afiliación no es conseguir mucho tráfico (muchos visitantes), sino que lo primordial es lograr que las visitas estén interesadas en adquirir lo que se publicita; por tanto, tienen que ser visitantes muy interesados en el nicho que, a su vez, estará relacionado con los productos afiliados.
Por ejemplo, si creas una web sobre los últimos avances en componentes de informática, los programas de afiliación que tengas podrán estar relacionados con la venta de esos componentes. Y tus artículos, bien documentados sobre las últimas novedades, pueden atraer a los visitantes y aumentar las posibilidades de que hagan uso de los enlaces.
Una web de ingresos por anuncios
Aquí el tema cambia, pues no se trata tanto de tener visitas interesadas en la compra de unos determinados productos, sino de que tu web tenga muchas visitas, cuantas más mejor; ya que, en ese caso, aumentarán las posibilidades de que cliqueen en una serie de cajas de anuncios que tendrás distribuidas por tu página web.
Hay muchas empresas que pueden proveerte de esos anuncios, la principal es Google Adsense, y normalmente suelen pagar unos céntimos por click realizado sobre sus anuncios. Esto, a primera vista, puede parecer poco, pero te aseguro que si consigues un tráfico alto para tu web (un número grande de visitantes) puede llegar a merecer la pena.
Una web que busca ingresos de este tipo intentará, por todos los medios, recibir muchos visitantes; y eso lo conseguirá publicando de forma regular con contenidos interesantes y especializados en un determinado nicho. También resulta fundamental posicionarla bien en los buscadores, lo que lograrás aplicando técnicas de SEO que ya aprenderemos más adelante.
Conclusiones
Todo lo dicho es muy importante, pero mucho más es que el nicho que elijas para tu web te guste, te motive. Sólo así disfrutarás dotándola de contenido y eso lo percibirán tus lectores.
Tienes que escribir sobre algo que te llene y de lo que tengas conocimientos, y es importante que lo hagas de forma regular y periódica. Por ejemplo, si pones en marcha un blog, sería muy bueno que acostumbrases a tus lectores a tener nuevos contenidos en determinados días de la semana, pues así crearán el hábito de visitarte y tu blog tendrá tráfico estable.
Y ya se sabe: cuanto más tráfico, mejor posicionamiento web y mayores son las posibilidades de ingresos por publicidad.
De todas las formas, que no te ciegue la posibilidad de generar ingresos con tu sitio web. Lo realmente fundamental es que comiences un proyecto ilusionante y que te proporcione muchos momentos de satisfacción. El resto vendrá poco a poco; ya que, incluso las webs más famosas tardaron un tiempo en generar los primeros ingresos y estos, al principio, fueron muy escasos.
En este curso te voy a enseñar a construir tu web desde cero, utilizando un gestor de contenidos llamado wordpress, muy fácil de usar y con grandes posibilidades.